¿Las décadas del cincuenta, sesenta y setenta? ¿las tres juntas en una misma colección? Si, Raf Simons lo hizo posible en el desfile primavera-verano 2015 de Dior. El director creativo no se privó en mezclar largos y siluetas de las distintas décadas.
Para los años cincuenta estuvo presente el new look con su eterna silueta "A", pero Simons no se conformó con reinterpretar dicho estilo, y le aportó su cuota de futuro acompañándolo con interminables botas en vinilo de diferentes colores. El retorno al pasado incluyó también a los sesenta,y así llegaron, las polleras plisadas con rayas de colores y vestidos cortos. Finalmente, los setenta tuvieron como protagonistas a los monos estampados en jacquard y bordados en lentejuelas plateadas, negras y oro.
La tradición se mantuvo a través de hermosos bordados, y la innovación se presento, por medio, de botas y tapados plásticos translúcidos estampados con flores. Esto último, sin dudas, demostró la experimentación por el cuál atravesó el proceso creativo de la colección.
Uno se pregunta cuál sería la reacción y/o que pensaría Christian Dior acerca del diseño de está colección...pero, en realidad, sería imaginar algo inútil...porque, de todas formas, esa crítica de la propuesta , hoy en día, queda reemplazada por los públicos que se condesan, principalmente, en la clientela y los medios de comunicación especializados.
En general, en la alta costura contemporánea y, sobre todo, donde las nuevas camadas de directivos creativos se han hecho cargo de firmas tradicionales, cada vez más avanza la desarticulación de la unidad de estilo,-característica de la moda centenaria (hasta los años 50)- produciéndose esa descoordinación de criterios estéticos que se palpa en las moda(s) actuales, las que materializan la no necesariedad de elementos similares en el diseño de una colección, los que han dejado de ser imperativos, para volverse facultativos e inesenciales. Así, es que las colecciones pueden hacer convivir múltiples estilos cada temporada.
Uno se pregunta cuál sería la reacción y/o que pensaría Christian Dior acerca del diseño de está colección...pero, en realidad, sería imaginar algo inútil...porque, de todas formas, esa crítica de la propuesta , hoy en día, queda reemplazada por los públicos que se condesan, principalmente, en la clientela y los medios de comunicación especializados.
En general, en la alta costura contemporánea y, sobre todo, donde las nuevas camadas de directivos creativos se han hecho cargo de firmas tradicionales, cada vez más avanza la desarticulación de la unidad de estilo,-característica de la moda centenaria (hasta los años 50)- produciéndose esa descoordinación de criterios estéticos que se palpa en las moda(s) actuales, las que materializan la no necesariedad de elementos similares en el diseño de una colección, los que han dejado de ser imperativos, para volverse facultativos e inesenciales. Así, es que las colecciones pueden hacer convivir múltiples estilos cada temporada.
Detalles
Y¿qué les pareció la colección? ¿les gustó? Espero sus comentarios! Hasta el próximo post.
Fuentes: Vogue España
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